Hablarte desde la transparencia radical es parte de nuestra singularidad, nosotros abrazamos un concepto llamado “construir en público” y eso nos da la libertad para realizar un montón de experimentos que de otra forma nos harían sentir completamente intimidados y hasta miedosos de probar.
Abrazar tu lado singular es una invitación a reconocer las herramientas con las que ya cuentas hoy para empezar a creer en ti y usar esto como combustible para crear.
Después de todo, cuando parece que todo ha sido dicho o creado en una era saturada de información y de muy poca atención
- ¿realmente importa lo que tú puedas crear?
- ¿cómo haces para destacar y tener un pedacito de esa atención?
- ¿cómo puedes crear bajo tus propios términos?
Estas preguntas no tienen una respuesta absoluta, porque cada persona puede llegar a diferentes respuestas usando su perspectiva singular. Así que te invito a reflexionar para encontrar las tuyas.
Para hacer más divertido el ejercicio, te desafío a que las respuestas que consigas las mires desde las siguientes perspectivas:
- Haciendo a un lado a tu yo pesimista: Empieza a conectarte con esas peculiaridades que te caracterizan y no tengas miedo de activar tu curiosidad. A fin de cuentas, cuando somos curiosos la creatividad nos abre caminos que antes pasaban desapercibidos.
- Encuentra tu aserrín: Has llegado hasta donde estás hoy porque has vivido una serie particular de experiencias y aprendizajes. Esto puede ser desde tu lado personal o desde tu lado profesional, pero sin duda quién eres hoy y lo que sabes, es la suma de todo lo que has experimentado.
- Cambia tu entorno: Si no haces nada diferente, es difícil que las cosas cambien. Cambiar tu entorno físico puede que requiera mucho esfuerzo y recursos que ahora no sobran, pero puedes empezar con pasos pequeños en el entorno digital como por ejemplo hacer que tu tiempo en línea no sea solo de ocio.
- Usa tus propias métricas: El camino de otros no tiene por qué ser el tuyo. No te dejes llevar por el éxito superficial que ves en otras personas, recuerda que cada perspectiva es distinta y que desde afuera solo estás observando una verdad a medias. No te obsesiones con el éxito y crea bajo tus propios términos.
- El mundo no necesita más de lo mismo: Todos tenemos algo que aportar que puede dejar el mundo un poco mejor de lo que lo encontramos y ese aporte será más significativo si viene desde tu lado singular.
Ya para finalizar te dejo con algo que nos gusta repetir constantemente: cuando te decidas a crear no partas por tu idea más grande, prefiere dar pequeños pasos accionables -y monetizables- que poco a poco te lleven hacia el objetivo final que quieres alcanzar.